Hagamos el ejercicio de retrotraernos al veintiuno de diciembre de 1988, fecha en la que tuvo lugar el hecho inicial del tema que nos va a ocupar hoy. Nos hubiéramos enterado de la noticia, si acaso, por la prensa, la radio o la televisión o quizá en alguna revista especializada, pero si hubiéramos querido, en aquella época, completar la información nos la hubiéramos visto y deseado. Hogaño el mundo ha cambiado tanto que la información, la buena y la mala, fluye constantemente y tenemos acceso a ella casi al instante.
Majestuoso, colosal, fastuoso, enorme… pero... ¡acabose!, ¡qué pena!, ¡ha quedado destrozado e inservible!, otra de las muchas consecuencias y daños de la guerra infame que está asolando Ucrania en estos días de febrero y marzo de 2022 bajo las bombas rusas. Se trata del avión ANTONOV AN-225 «MRIYA» que podemos ver calcinado en la imagen obtenida de este video en Youtube que a buen seguro destrozará el alma de cualquier persona sensible ante este daño más que probablemente irreparable.
Desde la fecha comentada anteriormente, este superavión, único, llevaba en servicio más de treinta años destinado a operaciones especiales y ha tenido la desgracia de estar en uno de los hangares del aeropuerto ucraniano de Hostomel, en Kiev. Ahora, a toro pasado, es fácil pensar que deberían haberlo sacado de allí en los prolegómenos de esta atrocidad para evitar este desastre.
A principios de esta semana no tenía ningún conocimiento de la existencia de este aparato, pero un video remitido por un amigo a través de Whatsapp informando de su destrucción, y de sus excelencias, me ha llevado a investigar y disfrutar de este aparato único, el avión más grande del mundo, del que solo se construyó un único ejemplar para la paz y la ciencia. Se proyectaron más aparatos para utilizarlos como lanzaderas de las misiones espaciales rusas, pero nunca se llegaron a construir.
- Joya de la aeronáutica con seis motores y un tren de aterrizaje de 32 ruedas.
- Dimensiones colosales, una envergadura de 88,40 metros (por encima del gigantesco A-380 que no llega a los 80 metros).
- Representaba 240 records en el mundo de la aviación.
- Era todo un escaparate tecnológico de soluciones.
- La cola, doble y con flaps, un diseño innovador.
- Menos de la mitad de aeropuertos del mundo disponen de pistas de suficiente longitud para poder operar.
- Su despegue provocaba unas turbulencias en la pista que hacía imposible el despegue de otro avión en los siguientes 15 minutos.
- Morro plegable hacia arriba para facilitar la carga. El tren delantero se abate para bajar la plataforma casi a nivel de suelo.
- Nominalmente podía transportar 240 toneladas. Su mayor transporte fue de 189,9 toneladas.
- Admitía piezas de carga hasta 70 metros de longitud.
- A pesar de su envergadura, tenía una gran maniobrabilidad. Un despegue casi vertical puede verse en el minuto siete de este vídeo en Youtube.
- Precio estimado en 3.000 millones de dólares.
«MRIYA», el apodo, se traduce como «SUEÑO». ¿Se reconstruirá? Es muy poco probable porque sus costes de operación eran enormes —15 toneladas de combustible por hora—. Sin embargo, se trataba de un recurso muy valorado por las organizaciones de ayuda internacional, por su capacidad de transportar grandes cantidades de provisiones de emergencia, durante operaciones de ayuda en desastres humanitarios.
Señero, en una acepción del diccionario, significa «único, sin par». Una gran pérdida.
ACTUALIZACIÓN 28 de junio de 2023
Una de las cosas maravillosas que tienen las publicaciones electrónicas es que permiten su actualización y/o corrección al instante. No me gusta en el caso de una entrada de blog, ya que lo correcto podría ser una entrada hueva haciendo referencia a la anterior, pero no da para tanto. Aparece una noticia en esta fecha en el diario El Mundo titulada Muerte y vuelta a la vida del Mriya, el símbolo de la nueva Ucrania. En ella se comenta que Kiev volverá a construir el avión más grande del mundo, destruido por Rusia. Será igual en su aspecto exterior pero con tecnología actualizada en su interior. La noticia puede (quizá) verse en este enlace.