Buscar este blog

domingo, 3 de abril de 2022

DESENCHUFAR


Inicialmente iba a hacer una cosa que no me gusta y es titular esta entrada con el término inglés —sin traducción en un único vocablo al español— standby, pero estrujándome un poco el magín he ido un poco más lejos hasta encontrar el vocablo español «desenchufar» que en el fondo es el objeto final de esta entrada. Consultada la FUNDEU sobre alternativas posibles en español a standby aparece «Modo de espera o en reposo, en referencia al que adoptan determinados aparatos cuando no están completamente encendidos, y estar a la expectativa de algo o estar a la espera de algo, en contextos más generales».

Llevo años en una cruzada mantenida contra los consumos fantasma de electricidad derivados de aparatos que no estamos usando y que tenemos conectados a la red eléctrica: algunos se «chivan» con los pilotitos encendidos como los televisores o rúteres pero otros consumen de forma silenciosa como por ejemplo el microondas.

Hay mucha información en la red, pero en el blog de una compañía comercializadora de luz ( enlace ) podemos ver un artículo interesante titulado «El consumo fantasma te cuesta 5 euros al mes». El subtítulo del mismo reza «La gran mayoría de aparatos eléctricos sigue consumiendo energía cuando están apagados o en standby. Este “consumo fantasma” depende de muchos factores, pero puede rondar los 400 kWh al año y es como tirar tu dinero a la basura».

Ya desde hace años utilizo regletas de enchufes con interruptor o con mando a distancia que pueden apagarse cuando los aparatos que tienen conectados se dejan de usar, principalmente televisión, vídeo, equipo de sonido, cargadores de móviles y tabletas, etc. etc. Esta semana he decidido dar un apretón y buscar a fondo esos consumidores fantasmas para ver que se podía hacer.

Tengo un buen aliado en un contador de energía como el que puede verse en la siguiente imagen

que me informa puntualmente del consumo total que está teniendo lugar en cada momento. Hay muchos y muy variados aparatos para medir de forma instantánea el consumo, incluso algunos que permiten visualizar los datos y estadísticas en el teléfono móvil.

Buscando y rebuscando por mi casa en un momento de nula actividad y desenchufando todo lo desenchufable hasta que el contador se quedó a cero, encontré lo siguientes aparatos:

  • Frigorífico.
  • Microondas.
  • Reloj-despertador (dormitorio).
  • Rúter.
  • Estación del teléfono fijo inalámbrico.

El consumo de todos ellos, más o menos estable, es de 0,160 kWh. ¿Es mucho? ¿Es poco? Todo dependerá del servicio que nos estén ofreciendo y de si podemos o no prescindir de ellos en algunos momentos del día, o de la noche, o asumir la incomodidad de encenderlos manualmente cuando nos hagan falta y apagarlos al finalizar. Es evidente que hay uno que no podremos ni deberemos tocar: el frigorífico. ¿Y los otros cuatro de la lista?

El microondas tiene una función ECO y no hay ninguna necesidad de que el panel nos esté dando la hora en todo momento cuando no lo estamos utilizando. Uno que podemos quitar sin problemas.

El reloj-despertador del dormitorio. Evidentemente su uso está limitado a las horas nocturnas, con lo cual podremos desenchufarlo cuando nos levantemos y encenderlo al acostarnos. Esto puede tener algún inconveniente si el aparato que tengamos no dispone de una batería o pila que mantenga la hora, los horarios de los despertadores y las emisoras preseleccionadas de radio. El mío tiene una batería interna que preserva todo ello, así que… sin problemas, uno menos.

El rútercon la Iglesia hemos topado Sancho. El último de la casa que se acueste lo podría apagar y encenderlo el primero que se levante, asumiendo el quedarse sin wifi en los teléfonos móviles durante la noche. Pero esto derivaría en un problema añadido si tenemos teléfono «fijo» porque en muchas ocasiones y ese es mi caso necesita internet para funcionar y por ello el rúter debe estar conectado. Y consecuentemente con esto, la estación del teléfono fijo inalámbrico es más de lo mismo.

Al menos me he quitado dos aparatos y he bajado el consumo a 0,130 kWh, teniendo en cuenta que 0,095 son del frigorífico.

Para aquellos que quieran poner manos a la obra con sus minicadenas, radios, televisores, vídeos, DVD’s, microondas y demás, la mejor solución son las regletas o enchufes con interruptores manuales, como esta, por ejemplo

Una solución menos buena pero significativamente mejor que dejar pilotos encendidos, es optar por enchufes o regletas controladas por mandos a distancia, como, por ejemplo,

O, si nos podemos exquisitos, este otro enchufe inteligente que podemos usar de forma manual o conectar a la red para programar desde nuestro teléfono inteligente.

Tómense estas sugerencias como meros ejemplos. Lo único que si puedo decir es que merece la pena darse una vuelta por los aparatos que tenemos conectados en casa y decidir si nos merece la pena seguir con los consumos fantasma, no solo desde el punto de vista del dinero sino de poner nuestro granito de arena en el devenir del Planeta. Todo suma. En todo caso, nunca nos ha preocupado esto de los consumos al dejar los aparatos en standby, porque la incomodidad de levantarse a cambiar el canal de televisión quedó atrás hace muchos años. Pero al coste que se está poniendo la electricidad, no está de más darse una pensada y obrar en consecuencia.