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domingo, 4 de abril de 2021

SEG-SOC


Aunque estamos ahítos de información que nos asedia por todos lados, el refrán aquel de «a la cama no te irás sin saber una cosa más» sigue siendo de actualidad y de aplicación. Ayer me visitaron mis cuñados Herman y Charo y mientras tomábamos un piscolabis en una terraza al aire libre, sin mucho frío pero con algo de lluvia, me enteré por ellos que se podía consultar tu expediente sanitario a través de internet en un portal denominado «Mi carpeta de Salud». Es verdad que el encontrado en este enlace parece ser de la Comunidad de Madrid y desconozco si los moradores de otras comunidades disponen de lo mismo.

Ya tenía instaladas en mi teléfono móvil dos aplicaciones denominadas «Tarjeta Sanitaria» y «Cita Sanitaria» que permitían realizar cómodamente algunas gestiones acerca de la Seguridad Social como citas y consultas. Pero hay otro mundo más allá que es acceder a los datos —¡son tuyos! — que de ti tiene guardados la Seguridad Social en tu expediente médico. Es verdad que los puedes solicitar en las dependencias de «Atención al Paciente» de centros y hospitales, pero es engorroso el desplazamiento, la espera, el relleno de la solicitud y el quedarte esperando un «ya le llamarán» para volver a recogerlo.

No hay nada como la curiosidad de asomarse a ventanas nuevas para que esta misma mañana me haya lanzado a consultar esta «joya». Evidentemente se trata de datos muy confidenciales y personales, por lo que deben estar debidamente salvados y guardados con mucho celo para que no sean expuestos a personas indebidas tipo hackers y amantes de lo ajeno que utilizan el síndrome de Diógenes para coleccionar datos que puedan ser usados en el futuro.

Dispongo de mi correspondiente certificado digital, mi DNI electrónico y mi correspondiente Cl@ve para poder acceder a este tipo de lugares de forma segura. Sin pensarlo más, me lanzo a consultar mis datos utilizando mi Certificado Digital y…


Probado en tres navegadores diferentes… ¡Protocolo no compatible! ¿Soy yo y mi ordenador? ¿Son ellos? ¿Será que es domingo de Resurrección, Semana Santa y están de vacaciones? En todo caso, mi gozo en un pozo, me quedo sin poder explorar mis datos.

Otra posibilidad es el uso de «Cl@ve». Me afano en esa vía alternativa y ¡Bingo! Estoy dentro. Se me muestra la portada principal de acceso…

Donde parece que ya voy a poder trastear y ver mi historial clínico, mis pruebas, mis análisis de sangre, mis listas de espera…

Pero la alegría dura poco en la casa del pobre. El sistema normal «Cl@ve» no tiene el suficiente nivel para acceder a estos datos sensibles, por lo que se requieren unas acciones adicionales …

Lo siento, superior a mis fuerzas. Me lo dejo anotado y otro día volveré; en el fondo solo se trataba de curiosear y ver la disponibilidad de información por si en algún momento es necesaria. No hay una necesidad perentoria, así que mi incipiente curiosidad tendrá que ser alimentada dentro de unos días, cuando tenga más ganas o el «portal» responda de forma amigable y sin mensajes evasivos como «protocolo no compatible» u otras zarandajas.