Buscar este blog

domingo, 17 de abril de 2022

DCCL

Aquel lector que haya descifrado el título como si fueran números romanos se habrá encontrado con el número arábigo setecientos cincuenta que, si las cuentas no me fallan, es el número de entradas consignadas en este blog hasta la fecha. Parece que fue ayer cuando a finales de 2007 me dio por empezar a escribir cosas en un blog con una cadencia semanal. Salvo muy pocas semanas que se pueden contar con los dedos de una mano, nunca en todo este tiempo he faltado a la cita.

Cada vez es más difícil escarbar en la memoria para tener un tema que llevarse al teclado cada semana. Supongo que habrá muchas repeticiones de algunos temas, pero con el paso del tiempo, lectores y escritos toman nuevas dimensiones. Otra cosa que ha cambiado con el tiempo es el tamaño de letra del blog, por alguna modificación en el gestor Blogspot; ahora, las primeras entradas aparecen con una letra de muy pequeño tamaño. Los lectores avezados ya sabrán que mientras se mantiene pulsada la tecla «CTRL» (en Windows, en MAC será otra similar), con la rueda del ratón se puede aumentar o disminuir el tamaño de letra de cualquier página web para adaptarlo a nuestros gustos.

En cuestiones de escritos electrónicos no es conveniente hablar de páginas, porque estas pueden ser de diferentes tamaños, la letra más o menos grande y los márgenes no digamos. Pero como curiosidad y hablando en términos de DIN A4 que es lo más estándar hoy en día, el blog cuenta con más de 1.600 páginas. Hablando de vocablos, el monto se acerca a los 740.000, que sería el equivalente, aproximadamente, a dos Quijotes.

Este año estoy acometiendo el blog con una nueva posibilidad que brinda la plataforma Amazon de auto publicar los libros en papel de forma muy fácil, sobre todo si aprendes las instrucciones, muy sencillas, y vas construyendo los textos desde cero siguiéndolas, cosa que estoy haciendo este año. Con ello, cuando finalice el año, será cuestión de darle al botón y poder disponer por un módico precio de todas las entradas del blog del año 2022 en un libro en papel.

Si la cosa llega a buen puerto, una tarea ingente será revisarse los catorce años anteriores y adecuar el formato al requerido por la plataforma. No es un trabajo sencillo sobre todo debido a la calidad requerida de las imágenes, pero con tiempo, pasito a pasito, todo se podrá hacer y con ello disponer en el futuro, aunque sea para mi uso personal, de los quince tomos correspondientes a los quince años que lleva publicándose el blog ininterrumpidamente. Y de paso, a alguna amistad a la que quieras de verdad, regalarle algún tomo…

No quisiera acabar esta entrada sin hacer una referencia a los números romanos, que me fascinaron allá por mis estudios de parvulario cuando contaba siete años. La enciclopedia escolar FARO que utilizábamos en clase y que todavía conservo, dedicaba la lección 5ª, páginas 228 y 229, al estudio de los números romanos, que en realidad eran una evolución de los etruscos, aunque esto se conoce poco.

La utilización de los números romanos continúa en la actualidad para ciertas cuestiones como la numeración de reyes y papas, capítulos de libros, algunas piezas de música clásica y en los relojes entre otros usos menos comunes. Ya dediqué una entrada en abril de 2009 titulada «NÚMEROS» a una curiosidad del número 4 en las esferas de los relojes con numeración romana. Es de las antiguas entradas así que, recuerde, rueda del ratón para aumentar el tamaño de la letra mientras se mantiene pulsada la tecla «CTRL»... si se está interesado en su lectura. Y perdón también en aquella entrada por la incorrecta utilización de las comillas, porque hasta septiembre de 2013 no escribí la entrada «COMILLAS» comentando el uso correcto de las comillas angulares ( «    »).

De todas formas, aquel que quiera saberlo todo sobre los números, en general, no debe dejar de acudir a una verdadera biblia sobre el tema escrita por Georges Ifrah y titulada «Historia universal de los números», dos mil páginas imprescindibles para conocer (casi) todo sobre el fascinante mundo de las cifras.